Hierba utilizada también para aliviar síntomas de la menopausia

por Perla Sofía Curbelo Santiago

Prepara infusiones con sus hojas para tratar el catarro o la tos. Crédito Foto: National Garden Bureau.

Prepara infusiones con sus hojas para tratar el catarro o la tos. Crédito Foto: National Garden Bureau.

La salvia es una de las más recientes hierbas que integré a mi huerto de aromáticas. Desde hace mucho tiempo estaba buscándola en centros de jardinería y viveros. Y tan pronto dejé de preguntar por ella, apareció. La he visto crecer frondosa en jardines y tiestos. Cuando publicamos una nota sobre el tomillo, otra hierba esencial, la huertera Nydia E. Vicente me prestó una de sus imágenes para acompañar donde aparecía éste combinado con la salvia en una jardinera.

En este momento, mis plantas aún están pequeñas. Tengo dos, y cada una está sembrada en tiestos de barro. Tan pronto estén más grandes, las trasplantaré juntas a otro tiesto de barro, mucho más amplio. Uno que conseguí en una tienda de antigüedades.

El nombre científico de la salvia (o en inglés, sage) es Salvia officinalis, y pertenece a la familia de las labiadas. Necesita sembrarse a pleno sol en un suelo ligero y bien drenado. Es el tipo de planta de bajo mantenimiento, pues requiere de poca agua. Combínala con otras aromáticas que tengan similares requisitos de siembra. Puedes reproducirla por esquejes o ramas, como también acodos.

La salvia necesita sol y buen drenaje. Utilízala para cocinar y para cócteles. También puedes utilizarla en los bordes de las camas de siembra. Foto: Agrochic

La salvia crece como un arbusto, y por eso también se utiliza como una planta ‘relleno’. Es aromática y sus tallos son leñosos con unas espectaculares hojas verde gris aterciopeladas. Sus hojas, que son la parte de consumo de la planta, son resistentes.

Una de las razones principales por las que deberíamos empezar a sembrarla más es porque cuando está florecida atrae abejas y mariposas, así como otros insectos beneficiosos. Hay diferentes variedades de salvia, con sus distintivas florecidas.

Foto: Agrochic

En la cocina, podemos utilizar la salvia para combinar con carnes, quesos y salsas a base de frutas, como la manzana. Además, las hojas de salvia son muy populares en la coctelería creativa como también en la preparación de infusiones.

Precisamente, la salvia tiene propiedades antisépticas y diuréticas. Las infusiones con las hojas secas o frescas se utilizan para hacer gárgaras cuando tenemos la garganta inflamada o como enjuague para úlceras y encías inflamadas. Cabe destacar, que entre sus componentes activos, contiene compuestos de estrógeno, por lo que muchas mujeres lo utilizan como remedio en la menopausia para moderar la transpiración del cuerpo. También se usa para aliviar el catarro y la tos. La salvia es toda una planta salvadora.

Su nombre común se deriva del latín salvere, que significa ‘salvar o gozar’ de buena salud. ¡Brindemos por la salvia!

Fuentes consultadas: Las buenas hierbas: una guía completa sobre el cultivo y las utilidades de las hierbas, de Jennie Harding.