Ganadores Donativos Ambientales Ford 2018

Por Perla Sofía Curbelo Santiago

La Isla tiene la capacidad para establecer unas 3,000 cuerdas de terreno dedicadas al cultivo de la pana (breadfruit). Este potencial viene apoyado por la demanda de los consumidores y de la nueva camada de manufactureros disponibles para procesarla.

“Cielo abierto” para el cultivo productivo de la pana en Puerto Rico. Foto: Agrochic

Para ello, es necesario comenzar con prestarle atención al estado de las fincas disponibles y a la siembra del cultivo. “Este es un camino que, aunque hayamos desistido de la finca, sabemos desde un principio que la industria no va a poder seguir (adelante) si no se desarrollan las fincas”, señaló Juan Carlos Rodríguez, fundador de Panawest, empresa dedicada a la manufactura de productos derivados de la pana, batata y malanga.

Juan Carlos Rodríguez. Foto: Agrochic

Precisamente, Rodríguez es también fundador del proyecto Renacemos entre panas, una iniciativa dedicada a la educación y preparación de árboles de pana para donar a agricultores interesados en el cultivo con el compromiso de comprarle a éstos la cosecha para su procesamiento. Este fue uno de los proyectos ganadores de los Donativos Ambientales Ford 2018.

A finales del año pasado, un grupo de agricultores y agro empresarios recibió un adiestramiento intenso sobre el cultivo de pana. Foto: Agrochic.com

En promedio, un árbol de pana tarda en madurar alrededor de cinco años. Una vez en producción puede generar entre 150-200 panas por año, dependiendo del tipo de atención que se le ofrezca. Sin embargo, su vigencia post cosecha se limita de dos a tres días. Así que lo hace imperativo contar con un plan para su venta y/o procesamiento.

Dan Rudoy, del Breadfruit Institute en Hawaii, estuvo a cargo de los adiestramientos. Foto: Agrochic.com

Su fascinación con los tostones de pana, llevaron a Rodríguez en el 2013 a investigar la situación del mercado en la Isla, ya que no era compatible la demanda por el producto con la oferta limitada.

Mientras estudiaba ingeniería, Rodríguez alquiló una finca en la zona oeste para sembrar más de 100 árboles de pana. Durante este periodo, y entre muchos “dolores de cabeza”, el joven empresario se dio cuenta de las características perecederas de la pana. Así que se dedicó a producir productos derivados. Desde harinas hasta sticks para freír. Estos productos los vendía directo al consumidor y a restaurantes.

De izquierda a derecha: Verónica Anadón Irizarry, project manager de Renacemos entre panas, Fernando Maldonado, Juan Carlos Rodríguez, Ericka Acevedo Fernández, Dan Rudoy, Edrick López Cappas, Abel, Decenia Vega y Daniel Lugo. Foto: Agrochic.com

Una vez desistió del proyecto de la finca, se unió a grupos internacionales dedicados a la promoción del cultivo de pana y a buscar financiamiento para su nueva empresa de manufactura de alimentos.

Siembra de cacao entre los cultivos de pana. Foto: Agrochic.com

En el 2017 inauguró Wonderen´s Foods con la marca Panawest. Entonces pasó el huracán María. Evento que afectó el suplido de panas durante el 2018, y lo llevó a él y a su equipo de trabajo a concentrarse en los derivados de batata y malanga. Éstos productos ayudaron a mantener a flote a la incipiente empresa.

De acuerdo con Rodríguez, el donativo de Ford llegó en un “momento crítico”. A raíz de su conexión con organizaciones internacionales, como el Breadfruit Institute de Hawaii, el ingeniero industrial ya participaba de proyectos enfocados en cómo contribuir al desarrollo de fincas. Así que luego del huracán, y para ayudar con la siembra de árboles como también a sus amigos agricultores, creó Renacemos entre panas, ya que la palabra pana implica un grado de amistad muy cercano.

A través de esta iniciativa es que el Breadfruit Institute donó fondos para establecer dos fincas en la zona oeste (Mayagüez y Las Marías) con el propósito de crear modelos agro forestales que incluyan la siembra de pana y otros cultivos intercalados.

Dan Rudoy, a la derecha, del Breadfruit Institute, trabaja junto a Juan Carlos Rodríguez para ayudarle a establecer un modelo agro forestal en dos fincas de la zona oeste del País. Foto: Agrochic.com

Rodríguez explicó que el grupo de agricultores con los que trabaja, poco más de una docena, recibe adiestramientos sobre el cultivo y mejores prácticas agro forestales. El Donativo Ambiental Ford permitirá darle mayor estabilidad al proyecto como también aumentar las donaciones de árboles de pana a más agricultores.

Los primeros adiestramientos se llevaron a cabo en la Hacienda Hostosiana, en Mayagüez, propiedad de Gudelia Acevedo y Wilson Pagán Vélez. Foto: Agrochic.com
Foto: Agrochic.com

Detalles de la convocatoria

Si perteneces a un grupo comunitario que ya está trabajando en proyectos ambientales, participa de la próxima convocatoria de los donativos ambientales de Ford que abre desde el lunes, 15 de abril hasta el viernes, 31 de mayo 2019. Las categorías son: reciclaje y reuso, energía renovable, y seguridad alimentaria y conservación de agua.

Visita el sitio DonativosambientalesFord.com para todos los detalles y para que te familiarices con todas las reglas y condiciones.

Desde su establecimiento en el 2001, el programa de Donativos Ambientales Ford ha aportado más de 1.6 millones de dólares a cientos de proyectos ambientales en Centroamérica y el Caribe.

Con este programa de responsabilidad social, Ford tiene como objetivo empoderar a las comunidades hacia un futuro más sostenible, al fomentar la multiplicación de esfuerzos colectivos que sirvan como catalizadores de cambios para alcanzar un mejor planeta.