Flores comestibles

Siete flores para ensaladas, postres y cocteles

Por Yadeliz Lacén Rivera y Perla Sofía Curbelo Santiago

Comer flores no es algo insólito. Existen numerosas variedades de flores seguras para nuestro consumo, las cuales podemos utilizar en la preparación de ensaladas, postres o bebidas.

El añadir flores a tus platos favoritos sirve para decorarlos como también para combinar diversos sabores. Es muy parecido como cuando integramos y consumimos las hierbas aromáticas en nuestros alimentos.

Para muchas personas, las flores comestibles todavía siguen siendo algo novedoso y experimental. Sin embargo, desde hace algún tiempo chefs del País las integran a sus recetas. Por ejemplo, la chef Lina Castillo, de Poliniza y especializada en comida crudivegana, utiliza las flores comestibles mayormente para la decoración de sus postres. Aunque también, las incorpora en variedad de platos.

Ésta recomendó ser muy cuidadosos con las flores, ya que sus pétalos tienden a ser muy delicados.  Además enfatizó en la importancia de limpiarlas bien antes de consumirlas.

A continuación, te presentamos algunas flores comestibles que puedes utilizar en tus comidas, ensaladas y postres:

1. Borraja (Borago officinalis) – Arbusto que puede crecer silvestre en bosques y terrenos baldíos. Atrae polinizadores como las abejas. Con propiedades reconstituyentes y calmantes. Sus flores azules pueden caramelizarse y utilizarse para decorar bizcochos, y frescas para dar colorido a las ensaladas.

2. Nasturtium o capuchina (Tropaeolum majus)- Es una planta trepadora con flores color naranja y amarillo. Crece en la mayoría de los suelos. Sus hojas son ricas en vitamina C, hierro y aceite esencial, lo que le da un sabor un tanto picante. Sus coloridas flores son comestibles y se utilizan para añadir contraste en ensaladas y para la decoración de bizcochos.

3. Caléndula o marigold (Calendula officinalis)- Es una planta anual. Es fácil de cultivar bajo el sol o a media sombra. Crece muy bien en casi todos los suelos. Con propiedades depurativas, antisépticas, astringentes, diuréticas y reconstituyentes, entre otras. Sus flores se utilizan para sopas y ensaladas. Además, su color amarillo naranja se utiliza para dar color a arroces, panes y en la decoración de bizcochos y tartas con queso.

4. Saúco (Sambucus nigra) – Crece silvestre en bosques y setos. Hay variedades ornamentales, pero solo las especies silvestres tienen valor terapéutico. Requiere un suelo húmedo y bien drenado. Puede crecer al sol o en la sombra. Sus flores frescas rebozadas y fritas son muy apreciadas en la cocina. Aportan contraste a frutos ácidos como la grosella. Además, con las flores de saúco se preparan licores, infusiones o vinagres aromáticos.

5. Flor de jamaica (Hibiscus sabdariffa)– Con propiedades diuréticas y también ayuda en el control del colesterol malo. Sus pétalos color rojo intenso se utilizan en ensaladas, infusiones, en la coctelería y en la elaboración de mermeladas, siropes y dulces. La flor tiene un sabor semi agrio.

6.  Pensamientos (Viola tri color var. hortensis) – Los pensamientos tienen un olor muy parecido a la menta, y por eso, son de las flores preferidas para integrarlas a las comidas. Se utiliza para infusiones, ensaladas, tortillas y vinagretas. Además, en la elaboración y decoración de postres como helados, jaleas y bizcochos.

7. Flor de calabacín y de calabaza– Son ricas en antioxidantes, agua y fibra. Además, contienen betacaroteno y minerales como el potasio. También son ricas en vitaminas C, B y A. Recoge las flores masculinas y deja las femeninas para la producción del fruto. Las flores se pueden utilizar para ensaladas, consumir rellenas de queso, rebozadas, en tempura y salteadas con otros vegetales y hojas.

Para consumir las flores comestibles debemos de aprender de sus cuidados. Aquí algunas recomendaciones:

• Deben cultivarse en un ambiente ecológico, libre de pesticidas.
• No recojas flores a mitad del día, ya que el calor puede secar el sabor y disminuir el color.
• Asegúrate de solo cortar las partes comestibles, como los pétalos.
• Una vez cortes la flores, se debe limpiar con agua y colocar en la nevera con un paño húmedo.
• Antes de integrarlas en el plato, pruébalas, para comprobar si tienes reacciones alérgicas.
• Las flores comestibles es mejor utilizarlas lo antes posible tras su cosecha o compra para que mantengan su frescura.
• Las flores de la floristería son para uso en arreglos florales y no para usos culinarios.

Fuentes consultadas:

Las buenas hierbas: Una guía completa sobre el cultivo y las utilizades de las hierbas, de Jennie Harding.

Good Companions: A Guide to Gardening with Plants That Help Each Other, de Bob Flowerdew.