Establece las prioridades de tu huerto comunitario

Por Perla Sofía Curbelo Santiago

Cuando cuentas con el dinero para desarrollar un huerto escolar, comunitario o institucional podrías invertirlo en numerosas áreas esenciales para la producción y mantenimiento del área. Todo huerto necesita dinero para producir alimento. Por eso es esencial seguir un plan de acción para saber cuáles son los objetivos del proyecto y establecer las prioridades para maximizar la inversión económica cuando esté disponible.

Proyecto De La Finca al Plato. Foto: Suministrada

Proyecto escolar De La Finca al Plato. Foto: Suministrada

Cualquier tipo de huerto, sin importar su tamaño debe ser planificado. Aquí es cuando empezamos a visualizar y plasmar sobre el papel nuestro huerto ideal. Pero, contrario a los huertos caseros, donde tal vez uno o dos miembros de la familia establecen cuáles son las prioridades, los huertos escolares, por ejemplo, dependen de la opinión de más personas, y en la mayoría de las ocasiones, cuentan con cero presupuesto para manejarlo.

Es por ello que se recomienda a la persona o comité responsable del proyecto que se acerque a posibles auspiciadores. El dinero puede provenir de diferentes fuentes: municipales, estatales y privadas. Lo primordial es saber para qué se solicitará el donativo y explicar claramente cómo se invertirá.

¿Cómo saber qué será prioridad en el huerto?

Hay que considerar que el huerto es un proyecto dinámico y que todos los años cambiará. Así que las prioridades también cambiarán cada año y dependerán de la etapa de desarrollo en que se encuentre. Si estamos solicitando algún donativo consideremos incluir en la propuesta dinero suficiente para cubrir aspectos que podrían se catalizadores del proyecto. Aquí cinco ejemplos:

Recurso humano– Un cuerpo de voluntarios responsable hace la diferencia en cualquier proyecto. Pero para ello, sus esfuerzos deben ser coordinados. Recuerda que las hortalizas del huerto necesitan atención con regularidad, así que un coordinador, aunque sea a tiempo parcial, contribuirá a mantener los equipos de trabajo ocupados y el huerto al día.

Tal vez una de las prioridades de tu proyecto agrícola sea construir un umbráculo. Foto archivo.

Una de las prioridades de tu proyecto agrícola podría ser construir un umbráculo. Foto archivo.

Estructuras- Estar a la deriva de las circunstancias es un riesgo para la producción en el huerto. Las plagas, lluvias intensas o un terreno pobre pueden resultar en un dolor de cabeza. Muchas veces debemos invertir en estructuras como cajones de siembra, umbráculos o sistemas hidropónicos para controlar los factores de riesgo y potenciar nuestros objetivos.

Herramientas y equipo- Es mucho lo que se puede adelantar si contamos con suficientes herramientas para que la mayoría de las personas comprometidas participen activamente. Asimismo, las herramientas deben ser de calidad y ajustarse a sus usuarios regulares. Por ejemplo, en los huertos escolares la mayoría de las herramientas deberían ser livianas y del tamaño apropiado para los jóvenes. De lo contrario, habrá niños y niñas adoloridos y tareas en el huerto incompletas.

Sistema de riego- Según vamos conociendo nuestros cultivos nos damos cuenta de cuáles son sus necesidades y gustos. También habrá épocas del año donde se necesitará reforzar el riego. La mayoría de las ocasiones lo resolvemos con la manguera o regaderas de mano. Pero si el plan es aumentar el área de siembra para una mayor producción de alimento, es necesario considerar la instalación de un sistema de riego ajustado a las necesidades de los cultivos. Nos ayudará a utilizar mejor el recurso agua y asegurar el riego que necesitan nuestras plantas, aún en épocas de poca lluvia.

Sustrato- Con la erosión nuestros suelos pierden muchos nutrientes que nuestras plantas necesitan para crecer y producir frutos de calidad. Es por eso que necesitamos añadir con regularidad más tierra o materia orgánica. No importa que tengamos las mejores semillas y plantas, sin un suelo saludable la producción de alimento será reducida.