20 consideraciones para disfrutar mejor del vecindario

Por Perla Sofía Curbelo Santiago

Cuántas discusiones entre vecinos podrían evitarse si se practicara más la etiqueta de jardín.

Quejas por las hojas secas que no se rastrillan, el perro, del cual no eres dueño, que termina haciendo sus necesidades en tu grama y la composta de la vecina que parece haberse ubicado, literalmente, en tus narices.

Poda tus arbustos y dale mantenimiento a tus plantas con regularidad. Foto: Agrochic

La etiqueta de jardín es una conducta o comportamiento esperado en el uso y disfrute de áreas verdes. Cuando el sentido común falla, los códigos o reglas son nuestros mejores aliados para reducir potenciales conflictos.

La mayoría de los jardines botánicos cuentan con su etiqueta o lista de reglas sobre lo que sí y no se puede hacer cuando estamos de visita. Asimismo, los eventos de jardinería y garden tours dejan muy claro (y por escrito) a los visitantes sobre el comportamiento esperado.

Por ejemplo, el New York Botanical Garden (NYBG) es muy específico sobre las áreas que designa para llevar a cabo picnics; prohíbe el corte de flores y hasta describe qué equipo es mejor dejar en la casa.

Déjate llevar por letreros para saber qué jardines pueden visitarse y en qué horarios. Foto: Agrochic

Igualmente, los organizadores del evento Garden Walk Buffalo, en Nueva York, que atrae anualmente a más de 60,000 personas en un solo fin de semana, restringe el horario y las áreas de visita a los jardines. Nadie quiere levantarse un sábado y encontrarse con 50 personas en el balcón tomando fotos hasta del gato.

Qué tal si utilizamos algunas de estas reglas de inspiración para crear nuestra propia etiqueta de jardín. Si empezamos con nosotros mismos estaremos contribuyendo a una comunidad mucho más civilizada, que respeta y considera a otras personas

 

1. Mantén tu patio limpio y organizado

Organiza y limpia tu patio con regularidad. Foto: Pixabay.com

A veces es imposible cortar el césped mensualmente y mucho menos mantener el topiario con la forma perfecta del elefante. Es tiempo y dinero. Sin embargo, sí es posible velar por su organización, desde recoger la manguera, apilar los tiestos y colocar las herramientas del jardín en su sitio.

Evita que algún vecino tropiece con algún artefacto que dejaste tirado en el patio delantero. Considera también qué vista quieres que tengan tus vecinos que colindan con el patio de atrás. Recuerda que cuando arreglamos nuestros alrededores contagiamos a otros a hacer lo mismo.

2. Rastrilla las hojas

Rastrilla, recoge o composta las hojas de tu patio. Foto: Pixabay.com

Siempre ha sido un punto debatible sobre cuándo hay que empezar a rastrillar esa hermosa alfombra de hojas y flores sobre tu césped. Yo diría que una vez comienzas a ver a tu vecino rastrillando y mirando hacia tu casa con más frecuencia, es momento de salir al patio y a recoger se ha dicho. Además, es importante evitar que el exceso de hojas, provenientes de tus árboles o no, llegue a los alcantarillados. No botes las hojas secas, úsalas en la composta o como viruta para mantener la humedad de tus camas de cultivos.

3. Poda los árboles, arbustos y ramas

Dale mantenimiento a tus árboles y arbustos. Poda aquellas ramas que colinden con la propiedad de tus vecinos. Foto: Pixabay.com

El estilo wildlife en la urbanización no significa dejar que las plantas y árboles se apoderen del entorno, en especial si tienes vecinos cercanos. Mantener podados los árboles es una responsabilidad ciudadana, ya que evita accidentes en casos de tormentas.

Asegúrate que las ramas de tus árboles no invadan los desagües en tu techo y mucho menos el de tus vecinos. Corta las ramas y controla el crecimiento de plantas que invadan el perímetro de otras casas. Antes de sembrar, edúcate sobre el tipo de cultivar y su mantenimiento. Siembra especies nativas.

4. Evita sustancias con fuertes olores

Evita utilizar sustancias químicas o que emanen fuertes olores. Foto: Pixabay.com

Muchas sustancias químicas como también orgánicas podrían tener un fuerte olor que trascienda los límites de tu patio. Si no tienes otra opción, asegúrate de llevar a cabo una aplicación segura y, si es posible, notifica a tus vecinos más cercanos para que tomen sus precauciones. Nunca se sabe si vives cerca de una persona que padece de fuertes alergias.

5. Composta segura

Coloca la composta en un área segura y alejada de la vista y narices de tus vecinos. Foto: Pixabay.com

Es importante evitar que la mayoría de los residuos de la cocina como también del patio lleguen a los vertederos. Sin embargo, también es importante evitar que cualquier olor producto del proceso de descomposición de la composta llegue a las narices de nuestros vecinos.

Antes de compostar, estudia bien la ubicación y qué vista tienes tanto tú como otras personas. Familiarízate con los códigos de tu urbanización o complejo de apartamentos sobre las compostas caseras. Venden recipientes compactos y muy chic para compostar, que evitan los malos olores, posibles roedores y son agradables a la vista.

6. Delimita tu patio

Delimita las áreas con una verja. Foto: Pixabay.com

Para contener las hojas, el perro y hasta tus niños, puedes levantar un muro o verja para marcar los límites entre tu propiedad y la de tus vecinos. Dependiendo tu presupuesto, puedes levantar muros en madera, cemento o muros verdes utilizando arbustos. Antes de hacerlo, conversa con tus vecinos al respecto.

7. Controla las herramientas de motor

Sigue los códigos municipales sobre horarios para llevar a cabo trabajos de alto volumen o al menos dale tiempo a la gente a descansar durante el wknd. Foto: Pixabay.com

Sí, lo entendemos. El sábado o el domingo son los únicos días disponibles para darle cariño a tu patio. Pero también son los únicos días que tienen muchas personas para descansar. Considera utilizar tus herramientas de motor, como la cortadora de grama, el trimmer, la sierra eléctrica y el blower, más cerca del medio día o en horas de la tarde. También puedes invertir en equipo que emita menos ruido.

Ciertas municipalidades, como también urbanizaciones, cuentan con sus propias reglas sobre el horario para llevar a cabo actividades de alto sonido (si vas a tener un garden party notifica e invita a tus vecinos cercanos), incluyendo los trabajos de jardinería. También, puedes ponerte de acuerdo con tus vecinos para todos coincidir en el día y horario del garden cleaning.

8. Iluminación nocturna

Si vas a alumbrar tu patio, evita focos que alteren el descanso de tus vecinos. Foto: Pixabay.com

Los focos de luz al pie de los árboles crea un efecto espectacular que nos permite ampliar el disfrute de nuestro jardín en horas de la noche. Pero también podría interrumpir el descanso y sueño de nuestros vecinos cercanos si no ajustamos la intensidad y el horario de activación. Cuando diseñes tu jardín nocturno, toma en consideración a tus vecinos y asegúrate de controlar la sensibilidad de activación de todas las luces. Ilumínate antes de invertir en las bombillas. Lee sobre plantas para tu jardín nocturno.

9. Devuelve las herramientas prestadas

Devuelve las herramientas prestadas tan pronto termines de usarlas. Recuerda limpiarlas. Foto: Pixabay.com

Practica lo que te gustaría también hicieran contigo. En algún momento necesitaremos de alguna herramienta o equipo motorizado para salir de algún apuro o simplemente para realizar un proyecto corto que no amerita invertir en ciertos costos. Ya sea una pala, un rastrillo o una cortadora de grama, una vez termines de usarla devuélvela inmediatamente.

Asegúrate de limpiarla. Si por alguna razón se ha roto o desmerecido durante su uso, ofrécete a pagar o contribuir para adquirir una nueva. Si te prestaron algún equipo motorizado, asegúrate de reponerle la gasolina, aún si no quedó establecido en un principio.

10. Supervisa tus hijos

Supervisa a tus niños todo el tiempo para evitar accidentes. Foto: Pixabay.com

Queremos que nuestros niños interactúen con la naturaleza, pero también es importante velar por su seguridad y por la propiedad ajena. Cuando estés de visita en un jardín público o el jardín de alguna de tus amistades, protege a los más pequeños de plantas puntiagudas y venenosas. Asimismo, evita que jueguen, sin tu supervisión, cerca de fuentes o embalses de agua.

11. Permiso para cosechar

Evita cosechar frutos y flores sin permiso. Foto: Pixabay.com

Las rosas acaban de abrir y se verían muy bien en el jarrón de tu mesita de noche; esos cherry tomatoes están en su punto para el disfrute de tu paladar. Si no es tu patio, asegúrate de preguntar antes de cosechar frutos, semillas o cortar alguna flor.

Recuerda que hay todo un esfuerzo e inversión de tiempo y dinero en cada cultivo del jardín. Dale la oportunidad a su dueño de decidir cómo quiere compartir la abundancia de su patio.

12. Supervisa tus mascotas

Deja a tu mascota en la casa o supervísala todo el tiempo. Foto: Pixabay.com

Hay jardines públicos que prohíben la entrada de mascotas (excepto los perros de servicio) a sus instalaciones. Asimismo, si estás de visita en el jardín de alguna de tus amistades, es mejor que dejes a tu Rocco en la casa. A menos que la invitación lo incluya.

Si por casualidad se te coló en la cartera o bulto, mantenlo siempre contigo. De esta manera evitarás que consuma alguna planta que pueda ser dañina para su salud y que tampoco le deje un regalito inesperado a tu anfitrión.

13. Admira los animales desde la distancia

Pregunta antes de alimentar los animales y evita perseguirlos o atraparlos. Foto: Pixabay.com

Es casi imposible evitar encontrarse con algún animal doméstico o wildlife en algún jardín. No les alimentes y mucho menos dejes que tus hijos (incluyendo adolescentes) le persigan. Esto incluye admirar desde la distancia los pájaros, las abejas y las mariposas.

14. Pide permiso antes de fotografiar

Antes de fotografíar y compartir en las redes sociales, pide permiso a tu anfitrión. Foto: Agrochic

En los jardines públicos no es necesario solicitar permiso, a menos que quieras convertir la ocasión en una sesión fotográfica que pueda bloquear el tránsito y el disfrute de otros. Sin embargo, en un jardín privado las reglas pueden ser diferentes.

Recuerda que los jardines también son una extensión del hogar. Porque esté al aire libre no significa que la intimidad del hogar termina ahí. Consulta antes con tu anfitrión sobre qué áreas del jardín podrías fotografiar para luego compartir con tus redes sociales.

Te sorprenderá conocer de muchas personas que prefieren mantener en la privacidad algunas colecciones de  plantas como también de esculturas que tienen esparcidas en su jardín.

15. Respeta los horarios

Respeta los horarios de visita al jardín. Foto: Agrochic.

Este código aplica a lugares o comunidades donde el tránsito es libre y cuentan con jardines irresistibles. Pregunta por los horarios para pasearte y detenerte a fotografiar el jardín delantero o lateral. Y por supuesto, entrar al jardín trasero, aunque no exista un portón que te detenga. De esta manera evitas que te llamen a la policía por obstrucción o violación a la privacidad.

16. Camina por los senderos

Respeta las áreas asignadas para sentarte, jugar y merendar. Mantente siempre en el camino identificado. Foto: Pixabay.com

Si hay un camino, síguelo y mantente en él. Esta es otra forma de respetar las áreas verdes. Quienes pasan el trabajo de pavimentar o crear un sendero lo hacen para protegerte a ti y también el césped y sus camas de cultivo.

17. No mutiles la propiedad

No mutiles los árboles y cualquier otra propiedad en el jardín. Foto: Pixabay.com

Evita la tentación de dejar tu marca personal y el “fulanito estuvo aquí” donde quiera que vayas. Esto incluye marcar árboles y muebles con objetos punzantes o pintura. Mucho menos cortar ramas, matar insectos y animales que de repente te intimiden (a menos que tu vida dependa de ello).

18. La basura al zafacón

Echa la basura en un zafacón. Foto: Pixabay.com

Este es un friendly reminder porque toda persona amante de la naturaleza sabe que debe dejar el área igual o mejor que la encontró. Pero por si acaso, antes de recoger los bártulos del picnic, asegúrate de llevarte todo desperdicio sólido para echar en el zafacón más cercano o disponer de él una vez llegues a tu casa.

Si estás de visita en el jardín de una amiga, el sentido común te dice que no le ensucies las áreas verdes porque de lo contrario no habrá una próxima invitación.

19. Fumar no tiene sentido

La idea de visitar un jardín es respirar aire fresco. Foto: Pixabay.com

A parte que es dañino para tu salud, la idea de visitar o pasar tiempo en el jardín es también respirar aire fresco. Pero si lo haces, pide permiso antes (los jardines públicos lo prohíben) y bota las colillas del cigarrillo en el zafacón.

20. Las fogatas tienen su ocasión

No fumes y tampoco quemes en el área. Foto: Pixabay.com

Evita la tentación de encender alguna hoja seca, ya sea con fósforos o una lupa. Supervisa a tus hijos en este asunto. Quemar una sola hoja puede provocar un incendio de grandes proporciones, aún en el jardín más pequeño.

 

Fuentes consultadas: 

NYBG.org

Gardenista.com

https://www.gardenista.com/posts/art-garden-etiquette-10-ways-show-respect-neighbors/

The Guardian.com 

https://www.theguardian.com/lifeandstyle/2009/aug/26/barbecues-etiquette-garden