Jardín de flores para un baño relajante

Por Perla Sofía Curbelo Santiago

 

La horticultura es también una herramienta para promover la salud mental en muchísimas personas. Por lo regular, interactuar con plantas, estar en contacto con la tierra y cosechar los frutos o las flores tiene un impacto positivo en nuestro bienestar, como por ejemplo en el estado de ánimo y la autoestima.

Jardinera urbana de plantas aromáticas en Chicago. Foto: Agrochic.

El requisito final para obtener mi Certificación en Terapia Hortícola consistió en la creación de una propuesta para desarrollar un programa de bienestar en terapia hortícola para madres y padres que regresaban a trabajar tiempo después del nacimiento de su bebé.

Como parte del programa era necesario desarrollar tres actividades (indoors y outdoors) relacionadas con plantas que contribuyesen en el bienestar de los nuevos padres.

Siembra en tu jardín plantas que puedas integrar a tu rutina de baño. Foto: Holger Link en Unsplash

Una de las actividades propuestas fue el Relaxing Bath Garden o jardín para un baño relajante. El proyecto, de dos partes, consiste en crear un jardín temático, y de fácil mantenimiento, utilizando plantas sensoriales que estimulen particularmente nuestra vista y olfato.

Lavanda. Foto: Pixabay.com

Entre las plantas propuestas está la lavanda y la camomila, ambas con propiedades que nos ayudan en la relajación, enfoque y restauración de nuestras funciones cognitivas.

Una vez cosechadas, las flores pueden utilizarse para la creación de pequeños arreglos que podríamos usar en la bañera o ducha como parte de las estrategias de bienestar y relajación.

Además de la lavanda, podrías utilizar romero y tomillo. Foto: Pixabay.com

Esta es una actividad que puede realizar cualquier persona. La misma es un apoyo para contribuir con el manejo de estrés, ansiedad, insomnio como también con retos de concentración, entre otros.

Además, a nivel de salud física, contribuye a mantener activas nuestras funciones motoras finas y gruesas; estimula nuestros sentidos y, a nivel social, contribuye a enriquecer nuestras capacidades de comunicación social.

Serie digital patrocinada, del 15 de abril al 14 de mayo 2020.

Materiales sugeridos:

  1. Un (1) Tiesto terracota 16” x 13.5”
  2. Un (1) empaque de potting soil (40 cuartillos)
  3. Una a dos (1 ó 2) plantas de lavanda
  4. Tres (3) plantas de camomila o tomillo variegado (olor a limón)
  5. Una (1) pala scoop
  6. Regadera
  7. Tijeras de poda
  8. Cinta floral adhesiva (floral tape)

Procedimiento:

  1. Aprovecha el proceso de siembra para conocer más sobre los cultivos que vas a sembrar: requisitos de siembra; propiedades; y variedad de usos.
  • Antes de trasplantar, huele cada planta; admira el color de las flores y de sus hojas. Pregúntate cómo te hace sentir. Si realizas esta actividad con alguien de tu familia, pueden utilizar el momento para intercambiar impresiones.
  • Llena hasta la mitad el tiesto de terracota con el sustrato; distribuye las plantas aromáticas en el recipiente más grande.
  • Una vez posicionadas, rellena el tiesto con más tierra. Deja al menos media a una pulgada de espacio desde el sustrato hasta el borde del tiesto.
  • Riega las plantas con agua hasta que la misma empiece a salir por los orificios del drenaje.
  • Estas plantas requieren de sol y son muy resistentes en clima seco.  Riego semanal o una vez el sustrato haya secado completamente.
  • Una vez tengas abundancia de flores, cosecha utilizando las tijeras de poda; crea arreglos pequeños y asegúralos con el floral tape o con una cinta.
  • Llena la bañera con agua caliente y echa el ramillete en ella o cuelga el ramillete mientras te duchas con agua caliente. Deja que la fragancia de las plantas te ayude a despejarte y a disfrutar de tu baño relajante, aunque sea por unos minutos.
  • Repite cuantas veces sea necesario.

La autora es fundadora de Agrochic.com y está certificada en terapia hortícola por el Chicago Botanic Garden. El proyecto final: A wellness horticultural therapy program focused on employees transitioning from parental leave to the workplace.