Fruta para ANONAdarse

por Perla Sofía Curbelo Santiago

Durante el fin de semana, aproveche y busque su guanábana. Esta fruta tropical está en temporada alta en Puerto Rico, así que la encontrará con facilidad en los mercados agrícolas.

La guanábana tiene muchas propiedades, entre ellas anticancerígenas. Foto: Perla Sofía Curbelo Santiago

La mía la compré en el mercadillo de El Departamento de la Comida en Santurce. Un lugar especial del cual estaré hablándoles en otra entrada y cuyos productos provienen de fincas y/o son elaborados siguiendo principios agroecológicos. La fruta estaba madura. Lista para devorarse fresca, prepararse en un jugo o elaborarla para un postre. Pero con este calor me decidí por un batido con leche de coco.

Su apariencia exterior, verde oscuro y con diminutas puntas a su alrededor, contrasta con su color blanco cremoso y de carnosa pulpa. Su aroma es sorprendentemente rico, pero más anonadada quedé con las numerosas semillas que tiene. De mi pequeña fruta obtuve 60 semillas, así que pronto a germinar y a sembrar en mi huerto. Y claro, a intercambiar porque su fruto tiene muchos beneficios para la salud, entre ellos propiedades anticancerígenas.

Las semillas de la guanábana son color negro brilloso o castaño. Foto: Perla Sofía Curbelo Santiago

Descripción de la fruta

La guanábana (Annona muricata L.) pertenece a la familia de las Anonáceas y se considera originaria de América Tropical. Según describe el especialista en frutas, Eugenio E. Toro, en la publicación La Guanábana, del Servicio de Extensión Agrícola, el árbol crece mediano y puede alcanzar hasta 20 pies de altura; sus flores son solitarias, carnosas, de color amarillo pálido o color azufre.

La pulpa de la guanábana es muy aromática. Úsela para refrescos, batidas, helados o cómala como fruta. Foto: Perla Sofía Curbelo Santiago

Cosecha de la guanábana

Cosechar la fruta debe ser toda una experiencia, pero cortarla puede ser el principio de toda una aventura culinaria, pues son muchas las recetas que puedes preparar con una sola fruta, imagínate si tienes varias de ella. La fruta es compuesta y se desarrolla de forma irregular. Toro la considera una fruta ‘relativamente grande’ con un peso entre 2 a 5 libras. Sus semillas son negras brillantes o castañas.

Para crecer, la guanábana necesita un clima tropical y, de todas las anonas de su familia, es la especie menos resistente al frío. En Puerto Rico, indica el agrónomo, ya retirado, que la guanábana produce mejor en suelos fértiles y bien drenados. No tolera suelos calcáreos como otras especies de este género, así que si le interesa sembrarlo realice su asignación y conozca su tipo de suelo y qué enmiendas debería hacer antes de sembrarlo directamente al suelo. Mi plan es sembrarlo en un tiesto grande a ver cómo me va.

Si lo siembra directo en el terreno, Toro recomienda “hoyos grandes, los cuales se deben volver a llenar con una mezcla de 2/3 partes de tierra fértil y 1/3 parte de estiércol curado”. Eche agua inmediatamente lo siembre.

Plagas. Las queresas y chinches harinosas puede causarle la muerte y la defoliación. Éstas traen como consecuencia la aparición del moho de hollín o fumagina. Toro destaca que la chinche de ala de encaje afecta el follaje causando un moteado claro en las hojas. Desaparece con las lluvias como también recomienda controlarlo con agua de jabón.

La guanábana se propaga por semilla y por injertos. En otros países latinoamericanos se le conoce como corosol, graviola, corocao de rainka y sapote agrio. En inglés se le llama Soursop. Pero el nombre es lo de menos, pruebe y sorpréndase usted lo antes posible.

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